Este es un maravilloso tratado y rompe hielo que nos ha regalado Dios.
Tomando la oportunidad de que muchísimas personas aman a sus mascotas, las invitamos a reflexionar acerca de la pregunta más importante, si ellos mismos irán al cielo.
Ahora puedes acceder a este tratado de forma gratuita, descargarlo e imprimirlo en tu propia casa o imprimirlo en grandes cantidades en una imprenta.
¿Creés que los perros van al cielo?
Unos dicen que sí, otros no y otros no saben qué responder. ¿Te lo has preguntado? Las personas están más preocupadas sobre si sus mascotas van al cielo, que de saber si ellas mismas irán. ¿Sabés si vas a ir al cielo cuando mueras? Dios enseña que nada impuro entrará ahí, Él es tres veces Santo.
¿Qué decís, te considerás tan buena persona como para que Dios te deje entrar al cielo? Él dio los 10 Mandamientos como un espejo para que veás cómo Él te ve. ¿Alguna vez has mentido?, así es, ¿y cómo llamás al que miente?, mentiroso. ¿Alguna vez has robado?, no importa el monto o qué fue, si robás algo se te llama ladrón. ¿Has matado a otra persona?, Dios enseña que tu enojo contra otra persona es asesinato espiritual. Entonces, además de mentiroso y ladrón, sos un homicida. Dios te juzgará por tus pecados y sos culpable. Con solo haber fallado a un mandamiento te hacés culpable de todos los demás pecados. Dios enseña que el castigo por el pecado es ser enviado eternamente a un horroroso destino alejado de Su presencia.
¿Te preocupa esto? ¡Hay Buenas Noticias! Dios hizo un plan para salvarte. Dios te amó tanto, que entregó a Jesús para pagar tu deuda y para que, si ponés en Él la fe para salvación, no mueras ¡sino que tengás vida eterna!
Jesús es Dios mismo. Él se hizo hombre y vino a salvar a los que están perdidos. Fue puesto a prueba en todo pero nunca pecó, Él es Santo.
¿Qué te pide Dios hacer ahora? Debés arrepentirte de no haber reconocido a Jesús como Salvador, Señor y Dios, y de todos tus pecados que le han ofendido. Debés creer que Jesús murió en tu lugar y resucitó, y que Él ya pagó toda la deuda que tenías por tus pecados y te ha dado la vida eterna como un regalo, no la merecés ni la podés comprar con buenas acciones, porque la salvación no es por obras, es un regalo que se recibe por fe en Jesús. Leé la Biblia todos los días y acércate a Dios en oración. Si estás arrepentido por tu vida pasada orá ahora mismo a Dios rogando por Su perdón, y orá a Jesús pidiéndole que Él sea tu Salvador, Señor y Dios.
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