El Evangelio a la manera de Jesús

¡El Evangelio es Jesús! Haciendo evangelismo, ¿qué le dirías a un musulmán, o a un hindú que no tienen ni idea de la existencia de Jesús? ¿Puedes explicar bíblicamente quién es Jesús?

La palabra Evangelio significa: Buenas Noticias.

Una buena noticia implica que hay algo que puede mejorar en una situación en particular o en mi vida. Una buena noticia puede ser que bajen las tarifas de buses, y esto es bueno porque hoy están muy elevadas. Una buena noticia es que ahora estoy curado de la enfermedad, y esto es bueno porque hasta ayer estaba enfermo.

Para que exista una buena noticia, debe ser que mi situación de hoy no es la mejor en ese aspecto en particular.

Si yo tengo carro, el precio de los pasajes de bus no me afecta, por lo tanto, para mí no es una buena noticia que los reduzcan.

Si yo estoy completamente sano, el que me digan que ahora estoy curado no tiene sentido, por lo tanto, para mí no es una buena noticia, de hecho, sería una locura.

El Evangelio es la Buena Noticia para todas las personas, porque hasta ahora son enemigas de Dios y Su ira está sobre ellas, caminando hacia el infierno, a una eternidad separados de la presencia de Dios y no tienen al Salvador. Y ellos no conocen ni comprenden esta verdad de Dios. Por lo tanto, para que el Evangelio de Jesucristo sea una buena noticia a mi vida, yo debo conocer primero que ya estoy condenado eternamente (Jn. 3:18).

Solo una persona que anda en bus apreciará una reducción del valor de los pasajes.

Solo una persona que está enferma apreciará que le digan que ahora está sana.

Solo una persona que comprende que es pecadora y que sus pecados ofenden todos los días a Dios, que es tres veces Santo, y que conoce que por ello ha sido condenada al infierno, apreciará a su Salvador y correrá a los brazos de Aquel que dio Su vida para pagar completamente la deuda que todos teníamos.

Las personas no sólo están enfermas, ellas están complacidas deleitándose en sus pecados ¡les gusta!. ¿Cómo los convencemos de que ese deleite les traerá consecuencias eternas y que los tiene apartados de Dios?

El Evangelio bíblico implica hablar primero de la santidad de Dios, del problema del pecado en todas las personas, del destino eterno por ofender a Dios que es tres veces Santo y del arrepentimiento, para luego, en segundo lugar, hablar de las Buenas Noticias de salvación, de nuestro amado Señor Jesucristo, de Su obra en la cruz, del perdón, de la gracia -el regalo de Dios-, de la salvación no por obras y de la salvación únicamente por fe en nuestro Salvador, Señor y Dios Jesucristo.

El Evangelio es invitar al arrepentimiento y a creer la Buena Noticia. (Mr. 1:15b).

Así como la primera palabra que menciona Jesús en su ministerio público no es “amor”, sino más bien: “arrepiéntanse”; de la misma forma Jehová no enseña en la biblia que Él sea Amor, Amor, Amor, sino que Él es: Santo, Santo, Santo (Is. 6:3: Ap. 4:8). Y ambos ejemplos deben de darnos una muy clara dirección acerca de quién es nuestro Dios, y cuál es el problema de todas las personas ante la Santidad de Aquél que es el Único Bueno y el Único Justo (Mr. 10:18; Ro. 3:26).

Gran parte del problema en el mundo, dentro y fuera de las iglesias, se debe a que las personas no han comprendido la Santidad de Dios, de hecho, se han elaborado en sus mentes, corazones y enseñanzas a un dios que no existe, a un dios que no está airado contra las personas por llevar las vidas de pecado, libertinaje y rebelión contra Él (Sal. 5:4-6; 11:5; Jn. 3:36), y ello es producto de los pecados del orgullo y la idolatría, clara muestra de rebelión. Es producto de la falta de humillación de las personas frente a Dios Soberano, y el que ellas no quieran volverse a Él (Éx. 20:3-5; Job 42:7).